Una de las maravillas más bellas de nuestros Ángeles Guardianes es que siempre están disponibles para acompañarnos, ayudarnos y guiarnos hacia nuestro propósito espiritual. Cuando nos sentimos angustiados o perdidos, nuestros ángeles están listos para ser invitados a nuestra vida para traer la solución y la paz que tanto necesitamos.
Tu ángel guardián actúa en múltiples áreas de tu vida y nos recuerda constantemente que su propósito principal es guiarnos en esta experiencia humana hacia nuestro mayor bien. Cuando ellos nos apoyan y ayudan, lo hacen con la intención de elevarnos y conducirnos hacia el amor del cual todos venimos.
Hoy te invito a reconocer a tu ángel guardián como el regalo más hermoso que jamás te hayan dado. Él está a tu lado en este mismo instante, mientras lees este artículo.
Imagínalo sonriéndote y derramando todo su amor sobre ti. Cuando aprendas más sobre él, te darás cuenta de que te ha amado incondicionalmente desde el primer momento de tu creación.
Tu ángel no solo te ha sido dado para hacer conexión desde antes de tu llegada a la Tierra. Tu alma conoce a tu ángel guardián y sabe que es el mejor amigo que podrías tener. Siento que hay una comunicación constante entre nuestra alma y nuestro ángel; no les gusta perderse de vista y se conectan siempre a través del amor.

Si hasta ahora no te has conectado con tu ángel guardián, no te preocupes: ¡ya lo conoces! Al volver a tomar conciencia de esta relación, te sentirás en casa, en tu lugar preferido. Tu ángel te recordará cosas que has olvidado y siempre te llevará de la mano hacia el propósito de tu vida. Él es tu gran protector y guía.
Una de las maneras en que me gusta conectar con mi ángel es hablando con él durante mis caminatas. Siento que, al compartirle mis pensamientos, sentimientos y recuerdos, le abro mi vida, permitiéndole entrar en mi mundo. Estas largas conversaciones se han convertido en una forma íntima de conectarme con él, y a menudo me hace reír cuando veo a la gente mirarme, pensando que estoy hablando sola, como si tuviera una conversación por teléfono. ¡Es tan natural y liberador!.
Te invitamos a probar esta práctica:
Cuando estés caminando, sea en cualquier lugar, llama a tu ángel de la guarda para que camine contigo. Visualiza su presencia a tu lado y siente la alegría de saber que ha sido enviado por Dios para ser tu gran protector y guía.
A medida que le ofreces tu devoción y gratitud por todos los servicios que te brinda, abres un canal de comunicación que nunca se cerrará. Este canal está conectado con tu corazón, permitiendo que las respuestas a tus peticiones y dudas, así como bendiciones ilimitadas, fluyan hacia ti.
Recuerda siempre que tu ángel de la guarda te conoce mejor que nadie en el universo. Por eso, es tu guía, tu guardia y tu amigo. En este contexto, quiero decirte que tu principal ángel de la guarda es tu Santo Yo Crístico.
¿Te gustaría saber más sobre tu energía crística? ¡Escríbeme! Estoy aquí para acompañarte en este mágico camino de autodescubrimiento y conexión.